a destrucción responsable de archivos documentales puede adquirir perspectivas nuevas si se le comprende desde los planteamientos del pensador W. F. Hegel. El principio rector de sus reflexiones es el que sostiene que “solo lo racional es real”.
Puede ser de enorme valía para el ámbito de las empresas y la productividad, si se deriva convenientemente hacia los terrenos de la dialéctica. En esta clave de comprensión hegeliana, unida a la labor de la destrucción documental, puede identificarse un certero camino hacia el progreso.
Lo que es racional es real
El ámbito de los negocios no debe ser entendido como un caótico conglomerado de ofertas y demandas. Es posible hallar ciertas pautas de causa y efecto que, en su conjunto, permiten comprender los derroteros empresariales como una sola columna de acontecimientos, dinámica y regular.
Quienes abordan por separado los negocios procurando concretar uno, cerrar otro, intentando en diferentes espacios de promoción, todo aisladamente, disgregan su esfuerzo, lo minan. Es necesario trabajar pensando la empresa propia y las demás como vinculadas por una red de causas, en donde todas se agrupen y se orienten hacia un progreso absoluto. Si se contara con el tiempo y los recursos suficientes, de acuerdo a estas nociones derivadas de Hegel, todas las empresas lograrían la prosperidad, si no al mismo grado, si al máximo nivel de cada una.
Lo que es real es racional
Las estrategias empresariales deben tomar en consideración este importante aspecto. Cualquier eventualidad que se presente en los mercados o los movimientos de las grandes corporaciones, nunca son gratuitos: todos ellos tienen su razón de acontecer.
En los negocios, como en la totalidad de lo real, no hay lugar para el caos, fortuna, azar o accidentes. Manejar una empresa de acuerdo a este panorama es situarla en una perspectiva superior a las de los competidores, quienes solo ven la confrontación un fin y no un medio para progresar.
Dialéctica empresarial
La forma en que las empresas avanzan hacia el progreso absoluto es la competencia, la superación de unas con respecto a otras sucesivamente. Pero lo que mueve a cada una es este mismo impulso dialéctico, desde el interior. La destrucción de archivos documentales “niega”, elimina el trabajo realizado para “afirmar”, dar la oportunidad de que se desarrollen nuevos proyectos. Si en la dinámica de los negocios todo tiene un sentido, lo que moviliza a cada firma a tratar de concretarlo son procesos internos vitales como la destrucción de archivos documentales.